Los insumos y servicios energéticos representan entre el 55% y el 65% de los gastos de panaderías y pastelerías. En este sentido, el gas licuado es una opción para ahorrar y ganar en rentabilidad.

Las panaderías y reposterías se caracterizan por tener procesos productivos que demandan mucha energía. Al respecto, el índice de precios al consumidor señala un alza nacional del 25,9% en las tarifas de energía entre agosto de 2021 y agosto de 2022, lo que ha incrementado (junto a otros factores externos) los costos asociados con el funcionamiento de estos negocios. 

Frente a este panorama, se requiere tener una fuente de energía sostenible, eficaz y potente para manipular y tratar las materias primas. A continuación conocerás cómo se encuentra el sector y el consumo de los productos de panadería en Colombia, además de los beneficios operacionales del gas licuado para el desarrollo de esta industria alimentaria.

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Panaderías y pastelerías en Colombia: estadísticas básicas

Los datos esenciales del sector de las panaderías y reposterías en Colombia son los siguientes:

• Sus ventas alcanzaron COP$4,7 billones en 2020 y emplea a unos 1,2 millones de personas.
• Existen 25.000 establecimientos. La mitad se encuentran en Bogotá. La capital, junto con Medellín y el departamento del Atlántico, son las regiones donde más se consume pan.
• El 98% de los colombianos consumieron pan en 2020. De hecho, fue el segundo producto alimenticio más consumido, con 21,2 kilogramos anuales por persona, solo superado por el arroz.
• Los colombianos compraron pan con una frecuencia promedio de cada 13 días. En 2020, la cantidad adquirida promedio en cada compra fue de 442 gramos y el importe invertido de COP$3.411.
• Las preferencias por categoría son pan blando o aliñado (39%), pan seco (22%), pan tajado tipo sándwich (20%) y pan tajado tipo sándwich especial (11%).
• Los productos regionales más emblemáticos son pan rollito (Bogotá), hojaldres dulces y salados (Medellín), pan piñita (Barranquilla), achiras (Neiva) y torta María Luisa (Eje Cafetero).

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Beneficios del gas licuado para panaderías y pastelerías

 El gas licuado ofrece ventajas competitivas para panaderías y pastelerías:

Adaptabilidad

Este combustible optimiza la gestión y el desempeño de equipos como:

Hornos: la potencia calorífica del gas licuado permite un control de temperatura más preciso durante la cocción y el secado por convección de los productos empleados en la fabricación de pan. Además, la velocidad de calentamiento reduce los períodos de precalentamiento y recuperación de la temperatura en el interior del horno cuando se abren las puertas para revisar el estado del producto.

Fermentadores: la panificación requiere levadura para que el producto final sea nutritivo, sabroso, aromático y crujiente. En este sentido, el gas licuado brinda a quemadores y refrigeradores la energía necesaria en cada fase del proceso de fermentación, sobre todo si se tiene en cuenta que más de la mitad de los consumidores latinoamericanos de productos de panaderías y pastelerías consideran el sabor como un factor clave de sus compras.

Amasadores: el gas licuado proporciona una fuente de energía limpia y eficiente para la automatización del amasado. Así, es posible simplificar las labores de preparación y obtener una masa con mejor volumen y capacidad para mezclarse con otros ingredientes.

Inocuidad

La esterilización de los productos es un factor clave en la industria de la panadería y la pastelería. A diferencia de la leña u otros combustibles, el gas licuado no contiene trazas de azufre, por lo que su combustión no contamina los alimentos en ningún punto del proceso productivo. Del mismo modo, el gas licuado contribuye al funcionamiento del sistema de agua caliente sanitaria, ideal para desinfectar utensilios y espacios de trabajo.

Sostenibilidad

El gas licuado es un elemento fundamental para la transición energética pues:

Supone ahorros: la producción de gas licuado en Colombia se encuentra en plena expansión, con más de 60.000 toneladas al mes. Esto significa un precio ventajoso para grandes y pequeñas empresas panaderas y pasteleras, pues con el gas licuado acceden a una fuente de energía económica y eficiente. Así, un horno abastecido con gas licuado, por ejemplo, ahorra hasta 30% de energía frente a un horno eléctrico.

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Conclusiones:

Las panaderías y pastelerías son un sector en pleno crecimiento y con una demanda energética en aumento. En este sentido, el gas licuado no solo es una fuente de energía confiable para sus procesos productivos; también ofrece beneficios ecológicos y una mejor calidad y rendimiento de los productos. Si tu organización empresarial está interesada en construir o mantener una infraestructura de gas licuado, consulta con nuestros asesores.

En asociación con Castleberry Media, estamos comprometidos con el cuidado de nuestro planeta. Por lo tanto, este contenido es responsable con el medioambiente.

Puntos más relevantes del contenido: 

• Las panaderías y pastelerías ofrecen el segundo producto alimenticio más consumido en Colombia.
• El gas licuado optimiza tres fases fundamentales de la panificación: horneado y secado de los ingredientes, fermentación de la masa y amasado.
• La combustión del gas licuado es inocua, por lo que no representa un riesgo de contaminación para los alimentos.
• El gas licuado es sostenible, pues su combustión es baja en emisiones de carbono.